Las bebidas de dieta llevan a compensar con más comida
¿”Una hamburguesa, papas fritas y un refresco de dieta”? Esta frase, junto con todas sus variantes, seguramente la has escuchado en repetidas ocasiones, y siempre se trata de lo mismo: comida chatarra, rica en carbohidratos y grasas, y una bebida de dieta sin calorías para acompañarla. La situación, aunque es bastante común, en realidad no ahorra muchas calorías: quienes toman este tipo de bebidas compensarían su ausencia de calorías consumiendo más alimentos calóricos, de acuerdo a un estudio que analizó los hábitos alimenticios de 22,000 personas en Estados Unidos.
Ruopeng An, profesor de kinesiología y de salud pública de la Universidad de Illinois, examinó 10 años de información de la Encuesta Nacional de Examinación de Salud y Nutrición (National Health and Nutrition Examination Survey), llevada a cabo por el Centro Nacional para Estadísticas de la Salud (National Center for Health Statistics), y en la que se le pregunta a los participantes que mencionen todo lo que comieron o tomaron durante dos días consecutivos. An tomó en cuenta la ingesta calórica diaria de los individuos, comparando aquella que provenía de alimentos y la aportada por bebidas.
Mientras que quienes tomaban bebidas de dieta o café consumían menos calorías de alimentos que los que tomaban bebidas azucaradas o alcohólicas, consumían más calorías que ellos a partir de “alimentos discrecionales”. En este caso, un alimento discrecional es uno que no necesariamente pertenece a ninguna de las comidas de un día (desayuno, comida, cena), ricos en calorías pero pobres en nutrientes, y que agregan variedad a la alimentación diaria. Algunos ejemplos son helados, galletas, chocolates y papas fritas. La siguiente gráfica muestra cuántas calorías adicionales consume una persona dependiendo de qué bebida toma (haz clic en ella para verla en su tamaño real).
An ofrece varias explicaciones al respecto: puede ser que quienes toman bebidas de dieta se sienten justificados como para comer más, así que optan por un pan o una bolsa de papas. Tal vez, para sentirse satisfechos, necesitan consumir alimentos ricos en calorías. O, también, es posible que prefieran una bebida de dieta porque se sienten culpables por consumir alimentos ricos en calorías. Aunque no es posible determinar si una de estas explicaciones es la causa, o en realidad lo es una mezcla de las tres, lo que sí es seguro es que tomar bebidas de dieta sin calorías no necesariamente ayudarían a una persona a bajar de peso si no observa con atención la cantidad y la calidad de la comida que consume.
Fuente:
Illinois News Bureau (2015). Diet beverage drinkers compensate by eating unhealthy food, study finds.